Javier Brochero

Y ahi estaban sólo ellos conversando en el café,
relatando sus historias con miradas de pasión,
encontrando las caricias fueron dándose el placer
y los besos más bonitos que ninguno conoció.

En el coche ahi abrazados el amor los sorprendió
y entre amigos lo prohibido fue imposible contener
con sus vidas en peligro de cualquier separación
arriesgaron continuar con el amor y sólo ser:

Amantes que llevan en silencio los recuerdos
de esos bellos momentos imborrables,
que cuida el corazón mimándolos
con la esperanza de volverse a ver.

Fue que al verse tan culpables la vergüenza los quebró
y por eso arrepentidos se alejaron con dolor.
En el aire había besos y deseos de pasión,
hoy vacíos de ternura y la ausencia de ese amor.